jueves, 15 de diciembre de 2011

Capitulo 30 “Mas nada que decir”

Ambos entre risas, empiezan a disfrutar del calor que emanaban sus cuerpos, desprendiéndose lentamente de sus prendas, la noche empezaba a caer y el frió de la noche se apoderaba de aquella cabaña..

Renata: sabes tengo una fantasía

Jerónimo ¡uy! fantasía (toma a Renata por la cintura acercándola a él)

Renata: ¡ay Jerónimo! Tú siempre de mal pensado

Jerónimo: ¿yo? Si tu fuste la de la fantasía

Renata: si pero no de esas que tu cabecita imagina, será que me puedes cumplir la fantasía de que no existe nada mas si no tu y yo que el mundo no está para hacernos daños. ¿Será posible?

Jerónimo: pues claro que te la cumpliré y de qué manera (se ríe)

Renata: ay ¡Jerónimo! Hablo en serio

Jerónimo: yo también hablo en serio (la besa apasionadamente)
Poco a poco la va colocando en la cama, cuerpo a cuerpo emanando amor, pasión, y redención el uno por el otro, dejándose llevar por el momento, pensando solo en ellos y en la fortaleza de su amor

Renata: tú eres lo más importante para mi gracias por hacerme mujer, gracias por hacerme feliz, y por llenarme de tanto amor.

Jerónimo: tú me haces feliz a mí, y en cuanto hacerte mujer pues tú fuiste eres y serás la mejor mujer antes y después de haberte entregado a mí, tú llenas mi vida de todo lo hermoso que pueda existir.

Mientras en la bonita, Adriana se dispone a dormir a los niños
Regina: tía, y mi mami

Adriana: tu mami esta con tu papi

Rafael ¿dónde?

Adriana: donde esa es una buena pregunta, este tu mami y tu papi están en lugar muy, muy bonito

Roberto: tía y nos traerán dulces

Adriana: si muchos(Adriana susurra “y tal vez un nuevo hermanito” y se ríe para si), muchos dulces pero será mañana así que vamos a dormir.

Regina que estaba en la habitación, ayudándola con los niños, escucha lo que Adriana dice.
Regina: Hay Adriana dices unas cosas.

Adriana: Podemos ser sinceras, Regina….

Regina: Eres tremenda Adriana.

Regina le colocaba las pijamas a Renatita, y una vez que termina de colocárselas, la acuesta en su cama y se dispone a contarle una historia.
La mañana siguiente….

Jeronimo se despierta y tiene entre sus brazos a Renata, le da un beso en la frente, y al momento en el que se iba a levantar, Renata despierta, le toma la mano…

Renata: Ven, no te vayas…

Jeronimo, regresa a la cama junto a ella, la besa y la mira con ternura, acariciándola..

Jeronimo: Buenos días, amor… ¿estas listas para nuestro dia?

Renata: Buenos días precioso, yo siempre estoy lista si se trata de estar contigo.

Jerónimo: Entonces prepárate porque hoy será un día de caminata.

Renata se coloca encima de Jerónimo, y de manera seductora…

Renata: Y si mejor primero desayunamos, (acaricia el pecho de Jerónimo con sus manos de forma ascendente y descendente, luego se acerca hasta el y leo besa apasionadamente)

Jerónimo juntas sus manos con la de ella, quedando luego el encima de ella… y mientras besaba su cuello susurra levemente

Jerónimo: “Mejor comenzamos con el postres”

Mutuamente se ríen, dejando así llevarse por la hermosa mañana donde los pequeños rayos de sol apremiaban y el olor fresco de los arboles aromatizaban todo el lugar…Después de tanto..

Renata se encuentra en el baño, abre la regadera…

Renata: Jeroo…. ¿Dónde estas?

Jerónimo: Espera estoy preparando algo.

Renata: Mejor ven rápido, rápido.

Jeronimo, llega rápido hasta donde se encuentra Renata

Jeronimo: ¿Qué te paso?.. ¿todo bien?… (lo dice en tono de preocupación)

Renata: Nada, solo que tu sabes el tiempo apremia.. ven aca..

Jeronimo: No me asustes de esa manera Renata.

A la final Jeronimo se acerca hasta su mujer, y ella lo toma de las manos..

Renata: Quiero aprovechar cada minuto, de nuestro tiempo para que estemos juntos.

Jeronimo: Todo el tiempo que desee mi pecas hermosa, se me esta ocurriendo algo muy divertido.

Renata: ¿No crees que es poco pequeña la ducha?

Jeronimo: Mejor… (Sonríe pícaramente), ¿para que quieres que sea mas grande?, así estamos mas juntitos.

Después que Olivia, hablo con Roberta por fin recibe una llamada de Samuel…

Olivia: Samuel ¿eres tu?…por favor dime que estas bien, mi amor, disculpa por haber desconfiado de ti, lo único que quiero es que estés conmigo, dime donde estas y voy a buscarte.

Aunque Samuel escucho cada una de las palabras que dijo Olivia de forma muy neutral y nada expresiva le contesto a Olivia.

Samuel: Estoy lejos, en una pequeña cabaña, al norte de Ensenada.

Olivia: Voy por ti, por favor no te muevas del lugar, te amo.

En la hacienda “La Bonita”, todo transcurría de forma normal, era la hora del desayuno y casi todos estaban ya dispuestos en la mesa, pero siempre uno que otro de los niños jugueteaba antes de sentarse definitivamente a comer.

Gonzalo: Vamos Roberto, no le hagas esto a tu abuelo, no puedo perseguirte por toda la casa.

Robertito: No me alcanzaras abuelito.

Matías se ríe a lo lejos.

Matías: Papa, tu ya no estas para estos trotes… Mejor déjamelo a mi..

Gonzalo se sienta, es todo tuyo hijo.

Matías: Ven Roberto, es hora de desayunar.. No te escodas
Matías empieza a dar vueltas, hasta que por fin logra agarrar al pequeño y llevarlo hasta su asiento.

Regina: Robertito, mi amor, mira a la abuela, no puedes estar corriendo así, cuando uno te dice que es hora de comer, es para que todos nos sentemos juntos.

Gonzalo: Hijo, ¿estas bien?, luego el viejo soy yo.

Matías: Hay que tener un entrenamiento físico para atender a estos niños.

Regina y Adriana se ríen, mientras que Reginita se acerca hasta Gonzalo.

Reginita: Abuelito, es que el se porta muy mal (se acerca hasta el y lo abrazo)

Renata y Jeronimo salieron juntos a dar una vuelta por esos grandes caminos y jardines, que tenían frente a ellos, era seguro el caminar cuando el sol estaba a su disposición, habían varias cabañas y uno que otros lugares para comer, a parte de eso cascadas escondidas al oeste de las residencias, un exquisito lugar para dar un paseo a caballo y de estar en contacto un 100% con la naturaleza. Al cabo de un par de horas, los dos llegan a una cascada preciosa, en la cual en medio del agua, se creaba un hermoso arcoíris.

Renata: Mi amor, esto esta hermoso.

Jeronimo: Si, jamás imagine que este lugar fuese tan lleno de vida, ¿lo sientes?

Renata: Si es como un lugar lleno de paz, como me encantaría traer a los niño aca, ¿Cuándo lo haremos?, creo que un día con toda la familia aca no estaría nada mal.

Jeronimo: Lo que diga y lo que quiera mi hermosa mujer. (la besa y la abraza acogedoramente), ahora solo disfrutemos este momento nosotros dos solos.

Renata se acerca a acerca a la cascada y con su mano agarra un poco de agua, Jeronimo estaba tras de ella y en forma juguetona ella le echa encima el agua y sale corriendo.. tras de ella claramente Jeronimo, hasta que este la alcanza y la arroja al suelo quedando el encima de ella.

Renata: No te enojes mi amor, ¡a poco no la estas pasando increíble con tu esposita!

Jeronimo: Eres terrible mi amor, pero te toca pagar.

Renata: A ver lo que pida “oh gran señor Linares” ( tono sarcástico)

Jeronimo: A ti, a ti, a ti, solo a ti y a cada una de tus pequitas.

Renata: Que castigo ¿verdad?

Jeronimo la empieza a besar lentamente…. Pero en ese momento, Renata se da cuenta que los caballos no estaban en el lugar que los habían dejado.

Renata: Jeronimo..

Jeronimo: ¿Qué pasa?

Renata: Los caballos, no están.

Jeronimo: Note hagas las chistosita, no me engañaras esta vez no ..

Renata: Es en serio Jeronimo.

Jeronimo, se asusta y se levanta, al ver que es verdad lo que decía Renata.

Renata: Dame tu celular.

Jeronimo: ¿Y el tuyo?

Renata: Creo que lo deje en la cabaña, que raro esta todo esto…
En el preciso momento que Renata toma el celular de Jeronimo es tomada de sorpresa por detrás, y el celular cae..

Después de un rato.. Olivia encuentra el lugar que le había señalado Samuel.
“Jamás imagine ver lo que estaba viendo y menos de la persona que sentía amar, un ser que ayudaba sin precedente, con un buen corazón y dispuesto a todo, quizás esta vez su bondad habría excedido cualquier limite de solidaridad, no podía creer lo que veía ante mis ojos”

Olivia: ¿Qué has hecho? – (Coloca sus manos sobre el rostro de Samuel, el cual mostraba una serie de emociones y a la vez mucha confusión)

Samuel hala a Olivia y la saca hasta el jardín de la pequeña cabaña…

Samuel: Solo quise terminar algo que había comenzado.

Olivia: ¿Y que pretendes hacer?… Porque te dejas influir de esta manera

Samuel: No es nada de lo que crees, y no creo que puedas entender mi dolor. Un hermano es alguien incondicional y siempre vas a estar para apoyarlo aunque no todo lo que el haga sea lo correcto.

Olivia: A lo mejor no lo sabré, pero algo que no estoy de acuerdo es que tu hagas los trabajos sucios de tu hermano, ¿Por qué?, ¿capricho?…. ¿o que cosa?, NO ARRUINES DE ESTA FORMA TU VIDA……
Olivia esta enojada, pero no pudo contener sus lagrimas… y luego de unos minutos en silencio

Olivia: No arruines este “algo” que se llamaba amor.

Samuel: Confía en mi que todo saldrá bien.
En la Bonita…..

Regina se encontraba en la sala de la hacienda, le parecía un poco extraño que Renata ni Jerónimo, hubieran llamado, así que toma el teléfono y se dispone a llamar, en eso Adriana pasa de largo y ve a Regina con teléfono en mano.

Adriana: Regina, llamas a Renata ¿verdad?

Regina: Adri, Si.

Adriana: Regina, déjalos que disfruten, tu sabes que ellos están bien, no debes preocuparte.

Regina: Ellos siempre llaman y se me hace raro que no lo han hecho, ni para decir que llegaron bien, ni para saber de sus hijos.

Aparece Gonzalo y escucha todo.

Gonzalo: Amor tu siempre estando de preocupona, Adri ella no va a cambiar (se ríe), llámalos Regina.

Regina: Siempre me preocupare, soy la madre y la suegra o ¿no?

Adriana: Si lo eres, bueno llama y avísame a ver como están, voy por los niños.

Regina: Tu también quieres saber como están, hay Adriana….

El primer intento que realizo Regina, la llamada salió desviada a buzón de llamada, luego repico incesantemente al teléfono de Renata y nadie atendía y por ultimo marco al teléfono de Jerónimo, pero salía como numero desconectado.

Gonzalo: ¿Nada?

Regina: No Gonzalo y me preocupa…

Matías, pasa por la sala con una manzana en manos y nota cierto aire de preocupación.
Matías: ¿pasa algo?

Gonzalo: Hijo, Regina esta llamando a Renata y Jerónimo, pero no contestan la llamada.

Matías: ¿Intentaron llamar al teléfono de la cabaña?

Regina: Ese teléfono, esta desconectado.

Matías: Tranquila Regina, las malas noticias son las primeras en saberse, quizás no hay muy recepción allá y por eso cuesta que entren las llamadas, no te atormentes, vente mejor salgamos con los niños un rato que están muy inquietos.

Roberta llega a la hacienda.

Gonzalo: Hola hija, ¿Cómo estas?, ¿y eso tu por aquí?
Roberta: Hola a todos, vine a hablar con Renata, de algo que me dejo preocupada.


Regina: ¿Paso algo?

Roberta: No, ¿Por qué noto que están como que nerviosos eh?

Matías: No hagas caso, es que Renata y Jerónimo salieron de paseo y no han llamado y ya Regina piensa que sucedió algo.

En ese momento Roberta recibe una llamada…

Olivia: Encontré a Samuel

Roberta: ¿Si?,¿Cómo esta?,¿Dónde fue y como?

Olivia: Mira no esta muy bien y estoy preocupada….. Tiene a dos rehenes…

Roberta: ¿Rehenes?

Regina escucha y se levanta…

Regina: ¿Rehenes?……

Roberta la mira y le hace una seña con la mano para que se espere, debido a que no escuchaba bien a Olivia…

Roberta: Olivia… Oliviaa…. ¿Qué estas diciéndome?..¿Donde estas?

De momento a otro, se siente como una ráfaga de viento trae consigo un clima oscuro, frio y con un fuerte torrencial. En ese momento llegan 5 hombre vestidos de negros, encapuchados y con armas en sus manos, unos empezaron a rodear la casa por fuera, cerrando cada puerta, y cada ventana, de manera que nadie pudiera salir. Los que estaban trabajando en las bodegas, los amarraron y los encerraron, hasta dejar de ultimo a los que estaban en la casa, tomaron de primera a Roberta ya que estaba mas cerca de la entrada de la casa, apuntándola con el arma y tapando su boca, haciendo que a la misma se le cayera el celular, otro de los encapuchados camina en dirección a las habitaciones, donde estaban los hijos de Renata y Adriana.

Matías: Detente (grita)

Encapuchado 2: ¿Quién te crees?

El encapuchado, va en dirección a donde esta Matías.. y al ver eso Gonzalo reacción

Gonzalo: Por favor, no le hagan nada, ¿Qué quieren?…. ¿dinero?, si es así no se preocupen le daremos lo que ustedes desean pero no le hagan daño a mi familia.

Encapuchado 1: Amárralos, (le dice al encapuchado 2), y ustedes vayan a ver quienes están en las habitaciones.

Adriana esta junto a Matilde en la habitación con los niños, mientras escuchan todo eso, las dos estaban muertas del miedo, pero debían ser fuertes por los niños.

Adriana: Matilde ¿Qué vamos hacer?, es peligroso estar acá con los niños.

Matilde: Voy a ver si esta ventana abre…

Adriana: Voy a marcarles a Jerónimo y Renata…

Matilde: Oiga señora Adriana no abre…

Adriana: Y estos dos no responden.

Los niños empiezan a inquietarse y eso uno de los encapuchados entra a la habitación.

Adriana: Por favor no nos hagan nada, y menos con los niños presentes.

Matilde: Si señor, llévese lo que quiera pero no nos haga daño.

El encapuchado 2, solo las tomo a ellas y las hizo caminar hasta la sala, amarrándoles las manos… por su parte el encapuchado 1 alias “El jefe”, ya tenia a Matías, Gonzalo, Regina, Roberta y a Manuelita, en una esquina amarrados, colocando junto a ellos a Matilde y Adriana, el encapuchado 2, busca a uno mas para traer a los niños al mismo lugar..

Matías: No se atrevan a hacerles nada a los niños o lo pagaran caro

Regina: Por favor les damos lo que pidan pero dejen a los niños fuera de todo esto, ellos son inocentes de todo.

Encapuchado 1: Cállense todos, o las pagaran.

Los demás encapuchados, llevan a los niños hasta donde están los adultos, cada uno de ellos estaban muy asustados, sin duda Adriana toma a sus dos pequeños, mientras que Regina toma a las dos niñas y Gonzalo a lo niños e intentan calmarlos. Dos de los encapuchados se quedaron vigilándolos y realizan un par de comunicados a alguien más, mientras que los otros tres empezaron a revisar las habitaciones saqueando algunas pertenencias. El Jefe por su parte va un instante hasta el despacho y se encuentra con un a foto de Jeronimo y Renata, y piensa “ellos deben ser”, saca la foto y la guarda para el.

Matías: ¿Cuánto tiempo más nos tendrán acá?, respondan…. Y déjennos en paz.

Uno de los encapuchados lo golpea con la pierna solo por el costado de la pierna de Matías, de manera de asustarlo

Encapuchado 3: Cállate y deja de preguntar, las preguntas las hace el jefe, no tu, y es mejor que te mantengas bajo perfil, sino quieres que pase algo…

En el despacho.

Encapuchado 1: ¿Cómo va todo?

Anónimo: Espera una hora mas, hagan un poco de desastre, pero no queremos ningún herido…
En otro lado….

Julián: Samuel, que te sucede ¿estas loco o que?, soy tu hermano… o estas mal de la cabeza, desamárrame ya..

Samuel: Deja de ser un manipulador por dios, entiende que el único que esta mal eres tu y solo quiero ayudarte.

Julián: Suéltame o pasara algo peor, quieres ser el culpable de la muerte de todos los Monterrubio, entonces muy bien déjame aquí y deja que todo salga como tu quieras.

Olivia: Samuel, hazle caso por amor a Dios, no puedes permitir eso.

Samuel: Olivia deja de preocuparme más de lo que estoy

Julián: Eres un gallina y siempre lo has sido suéltame Samuel o ya veras.
Olivia: No lo escuches, no escuches lo que hace es para jugar contigo.

Samuel: Olivia porque te contradices.

Olivia: Mira Julián lo que quiere es que tu no sepas que hacer.

Julián: Ustedes creen que soy un idiota y ustedes ¿Quién son? .. “los salvadores de la familia Monterrubio” , no me creen busquen en el bolsillo de mi cómplice, tomen el celular y marquen la ultima llamada pongan el altavoz y escuchen.

Samuel busca el celular y se lo pasa a Olivia quien es la que marca….

Encapuchado 1: Sr Julián, estamos esperando sus indicaciones.

Julián: ¿Dónde están Jeronimo y Renata?

Encapuchado 1: Ya los tienen

Julián: Si en una hora no estoy allá los mat….

Olivia reacciona y corta la llamada antes de que Julián pudiera terminar de decir la palabra..

Olivia: Estas mal Julián, en que momentos cambiaste…Samuel por favor ven conmigo.

Ambos salen de la cabaña.

Samuel: No se que voy hacer.

Olivia: Creo que lo mas lógico es ir a dar parte de todo esto a la policía, tienen como rehenes a los Monterrubio y de Renata y Jeronimo no sabemos nada, además tu idea ¿no era ayudarlos a ellos?

Samuel prende un cigarro, estaba sudando y le temblaba la mano.

Samuel: Si, pero todo esta tomando otro rumbo y siento que todo se me sale de mis manos.

Olivia: Amor, confía en mi, juro que todo acabara (lo abraza), me voy, me llevare este celular,
esto la policía lo resolverá.

Olivia va camino a la procuraduría, en el camino piensa lo que debe hacer y llama a Roberta, pensaba que tal vez no era uno de los rehenes y podría ayudarla, pero para su mala fortuna, el teléfono aparecía desconectado, por instinto marca al celular de Renata, el cual suena incesantemente pero nadie atiende y por ultimo marca al de Jeronimo, pero este también estaba fuera de servicio. Mientras en la Bonita. En el despacho “el jefe“ recibe una llamada.

Desconocido: Señor, discúlpenos.

Encapuchado 1: Que paso, ¿ya los desapareciste?

Desconocido: No señor, nos equivocamos, y no eran las personas que esperábamos, nos fallaron en la información.

Encapuchado 1: Como que no eran las personas, como que se equivocaron están idiotas o que, esto se lo tendrán que explicar al señor Julián.

Desconocido: Pero no responde a nuestros llamados.

Encapuchado 1: Encuéntrenlos a como de lugar.

Todos escucharon en la sala como estaba de enojado el bien llamado “jefe”

Matías: Papa, ¿Qué vamos hacer?, ya llevamos mucho tiempo aquí, ¿algún plan? (entre susurros)

Adriana: Yo creo que es muy peligroso y con los niños aquí, no podremos hacer mucho.

Gonzalo: Hijo, estoy de acuerdo con Adriana, no podemos arriesgarnos.

Regina: Hay que confiar en que no nos pase nada.

Gonzalo: Así será, intentare ofrecer de nuevo dinero.

Matilde: Diosito, que todo esto acabe rápido.

El jefe sale del despacho, enojado y alterado, por otro lado los niños no dejaban de llorar, mientras mas minutos pasaban las cosas se ponían mas tensas.

Encapuchado 1: Callen a esos niños ustedes dos (señala a Adriana y Regina)

Encapuchado 2: Señor ¿Qué le sucede?

Encapuchado 1: No preguntes por ahora.

Olivia cumplió con ir a la procuraduría y va con todos los oficiales a la Bonita, apagaron las alarmas de los vehículos para entrar sin sospecha, era un equipo de por lo menos 20 policías, al entrar empezaron a rodear la casa, fijándose donde estaban las entradas y en que condiciones se encontraban, un grupo fue hasta las bodegas, donde encontraron a un grupo de trabajadores amarrados y golpeados, en ese grupo estaban Carlos y Lázaro.

Carlos: Oficial… ¿dígame que esta pasando?

Oficial: Hay rehenes dentro de la casa grande, no tenemos información ni de quienes son, ni a cuentos tienen hay adentro.

Lázaro: Carlos, mira quien esta allí

Carlos: ¡Olivia!, ¿Qué hace ella aquí?

Oficial: Esa señorita fue la que levanto la denuncia.

Ambos se asombraron, Olivia estaba parada justo detrás de la puerta de su carro a unos 100metros de las bodegas, ambos salieron corriendo hasta donde ella se encontraba.

Carlos: ¿Cómo te enteraste?

Olivia: Solo puedo decir que lo sabrás a su tiempo, ahora lo más importante es que rescaten a la familia Monterrubio y averiguar donde están Jeronimo y Renata.

Lázaro: Los patrones no están aquí (se la queda mirando fijamente y cruza sus brazos), Es obvio que usted sabe algo mas, ¿Por qué no lo dice?

Carlos: Lázaro, creo que por este momento ella tiene razón, y todo esta muy raro, pero allí adentro están personas muy importantes, así que luego le sigues, esto no se queda así.

Ambos corrieron a ver de que manera podían ayudar…. Algunos de los oficiales, se dieron cuenta que todas las ventanas estaban selladas y no se escuchaba mucho ruido, hasta que uno de ellos llega hasta la ultima entrada de la casa, topándose con un “encapuchado”, pero de espalda, ambos empezaron a forcejear, el oficial intentado ante todo inmovilizarlo y quitarle el arma, en una de esas un tiro se escapo… Dentro de la casa..

Encapuchado 1: Vayan a ver que esta pasando, solo quedan unos minutos para que el mayor nos llame, sino ya hay ordenes.

Uno de los “encapuchados” se da cuenta que hay oficiales allí afuera, pero sin darse cuenta ya habían oficiales dentro de la casa cuanto este se voltea para avisarle “al jefe” lo que estaba aconteciendo, ven a los oficiales dentro de la casa si saber que hacer toman una posición de defensa apuntando con el arma a los Monterrubio, “el jefe” ya había sido inmovilizados por los agentes. En medio del forcejeo por controlar la situación.

Encapuchado 2: Si se me acercan les disparo (tenia apuntado a uno de los niños de Renata)

Regina tratando de protegerlo hizo un movimiento que puso nervioso al encapuchado al cual se le escapa una bala que desafortunadamente hiere a Matías en una de sus piernas, por lo que al ver lo complicado de la situación alguno de los oficiales que aun están afuera de la casa entrar sin que estos se den cuanta.


Encapuchado 2: Si no creen que hablo en serio no me prueben porqué ahorita mismo mato a estos mocosos.

Los oficiales le piden que baje el arma pero este no accede por lo que se ven obligados a disparar inmovilizándolo, los niños al ver todo esto se les incrementa aun mas su nerviosismo, por ende no dejaban de llorar. Lázaro y Carlos entran en la casa ya una vez que todo está bajo el control.

Aun todos nerviosos por lo sucedido Adriana no paraba de llorar, Manuelita y Herminia se habían llevado los niños a la habitación para calmarlos, mientras que Lázaro y Carlos llevan a Matías al hospital para revisar su pierna.

Luego de que los oficiales salieran de la casa, Adriana se encontraba en estado de shock y estaba sentada en uno de los muebles, por su parte, Gonzalo abraza a Regina.

Gonzalo: Ya no lloren mas todo ya paso gracias a Dios no hubo contratiempos y Matías ya va a estar bien a demás háganlo por los niños vayan con ellos que las necesitan.

Adriana: Está bien don Gonzalo tiene toda la razón.

Por otro lado…….. “En la cabaña”

Renata: Que bonito es ver un celular, que sirva y con señal, me muero por saber de mis niños…

Jeronimo: Si llámalos, también quiero escucharlos, amor pon el alta voz, voy por una fruta ¿quieres?

Renata: Si luego que paso el susto, me entro de nuevo el apetito, enserio tus amigos están muy locos.

Jeronimo: Solo un poco, son buenas personas…

Renata: Que raro, nadie contesta…

Jeronimo regresa con una manzana, la cual le da a Renata.

Jeronimo: ¿repica?

Renata: Si, me parece extraño que ni Manuelita conteste.

Jeronimo: Préstame, yo marco…

Con todo lo que paso en la hacienda el teléfono lo habían dejado desconectado

Renata: ¿nada?

Jerónimo: No nada no contestan ¿Qué será?

Renata: ¡Ay! no mi amor esto no me está gustando nada

Jerónimo: Ya despreocúpate debe ser que se fueron a pasear con los niños.

Renata: Si y ¿también se fue manuelita y Herminia? No Jerónimo ¡claro que no!

Jerónimo: Ok está bien está bien ¿qué quieres que hagamos?

Renata: No se llámale a Carlos haber si te contesta.

Jerónimo: Déjame intentar.

Pero Carlos había dejado el celular en la camioneta mientras estaba en el hospital con Matías.

Jerónimo: Nada no contesta…….. No será que esta con Matilde en…

Renata: ¡hay jerónimo! No seas payaso.

Jerónimo: (se ríe) ay Renata ya no te preocupes todo está bien sino ya nos hubieran avisado ¿no crees?

Renata: ¿Será?

Jerónimo la jala por un brazo quedando en la cama los dos abrazados pero Renta aun con una preocupación por sus hijos.

Renata con las manos en el pecho de Jerónimo y su cabeza recargada en el.

Renata: No se mi amor pero hay algo que no me checa yo si prefiero que nos regresemos, es que no me la voy a pasar bien.

Jerónimo: Bueno si eso es lo que la reina quiere así será nos regresamos a la bonita haber que es lo que pasa.

Renata: Vez por eso te amo corazoncito de mi vida.

Luego de un rato ya Matías de regreso a la bonita fuera de todo peligro Adriana haciéndole todo lo que necesita.

Adriana: Mi amor estas bien ¿todo bien, no te duele?

Matías: Adriana no seas tan exagerada solo fue un rosón no fue nada.

Adriana: Pero igual, si me asuste mi amor. Haber ¿dime qué hago yo sentí?

Matías: ¿Te digo que harías sin mí?

Adriana: No mejor no

Por otro lado la noche había caído Jerónimo y Renata llegan a la bonita con su típica alegría, aunque Jeronimo nota algo extraño, pero para no asustara “falsamente” a Renata prefiere guardar silencio, al entrar se encuentran con Roberta, Regina y Gonzalo sentados en la sala platicando aun de lo acontecido.

Renata: Hola, hola ya llegamos.

Regina: Hija gracias a Dios está bien.

Renata: Y como porque no debemos de estarlo.

Regina: Lo que pasa es que los estuvimos llamando pero nunca nos pudimos comunicar.

Jerónimo: Por allá había pero poca señal, no era muy frecuente, además que perdí mi celular, pero nosotros también estuvimos llamando y nadie contesto.

Renata: Aquí pasa algo, ¿por qué esa cara?

Roberta: Hermanita si te contáramos

Renata: ¿Qué paso? Donde están mis niños.

Gonzalo: Los niños están bien están en su cuarto.

Jerónimo: Pero entonces que fue lo que paso

En ese momento entra Carlos ya todos reunidos comienza a contarle todo a Jeronimo y Renata.

Renata: Pero hay algo aquí que no me checa o como “Olivia” sabía todo lo que estaba sucediendo como sabia Olivia que los tenían aca.

Carlos: Eso fue lo mismo que le pregunto Lázaro pero por lo que estaba sucediendo yo preferí dejarlo para después.

Jerónimo: Todo esto tiene que ver con Julián, estoy seguro.

Roberta: Yo no tengo duda de que sea así, yo se donde esta Olivia, hace un rato me paso un mensaje, dijo que están en la delegación de baja California.

Gonzalo: No me extrañaría que detrás de esto haya algo más.

Renata: Lo importante es que todos están bien.

Roberta, Gonzalo, Carlos y Lázaro, se adelantan…

Jeronimo: Amor ¿vienes?

Renata: No mi vida, prefiero quedarme aquí con los niños, con mama, con Matias quiero ir a verlo un rato y platicar con el y con Adri, ¿no te molesta?

Jeronimo: (la abraza y le besa la frente), como crees que me va a molestar, ¿sabes que te amo?

Renata: Claro que lo se, y yo a ti, cuídate mi amor, mantenme al tanto.

Jeronimo: Así será, dale un beso enorme a nuestros hijos.

Renata y Regina van a la habitación de los niños, Renata le da el biberón a la pequeña Renata, mientras que Regina intenta dormir al resto de los niños, contándoles algunos cuentos. La noche se hizo larga, eran más de la media noche, y aun no regresaban. Julián había sido detenido, al igual que cada uno de sus cómplices, Samuel no escapaba de ser retenido por la policía ya que tuvo retenido de manera involuntaria a dos personas, aunque su condena podía ser pagada bajo fianza, en cierto momento Jeronimo vio a Julián, ambos quedaron frente a frente y Jeronimo no podía contener las ganas de querer matarlo, a la final solo hubo un intercambio de palabras. Al salir de la procuraduría.

Jeronimo: Por lo menos vamos a poder dormir en paz y seguros.

Carlos: Si, y espero que ese hombre por su propio bien no salga nunca mas de esa cárcel.

Gonzalo, se quedo unos instantes con Roberta, quienes agradecieron encarecidamente la ayuda que les brindo Olivia y de la misma manera a Samuel, ofrecieron su ayuda para que Samuel lo sacaran rápidamente de la cárcel.

Olivia: Muchísimas gracias, y no se preocupe se como manejar todo esto.

Gonzalo: No hay de que gracias a ti, por salvar mi vida y la de mi familia.

Jeronimo se acerco un instante y se unió al comentario que hacia Gonzalo a Olivia

Días después………….

Matías ya totalmente recuperado y puesto en pie……….

Regina: Hija ya estamos listos todos para regresar.

Renata: No se vayan por favor.

Adriana: Bueno si quieres nos quedamos a vivir contigo (en forma de broma)

Renata: ¡ay Adriana no seas payasa!

Lázaro: Ya señora la camioneta esta lista para llevarlos al aeropuerto.

Renata: Gracias lázaro pero Jerónimo y yo los llevamos.

Jerónimo venia saliendo de su habitación

Jerónimo: Bueno suegro ya todo listo para llevarlos.

Gonzalo: Vamos entonces no hay mas que esperar.

Renata: Herminia, Manuelita les encargo los niños por favor me los cuidan cualquier cosa me marcan al celular.

Regina: Ya hija……. Ay esta madre tan abnegada.

Renata: Si, si ya voy… Matilde me los cuidadas.

Matilde: Si señora vaya tranquila no se preocupe yo misma se los cuido y no me les voy a despegar.

Una vez que dejan a todos en el aeropuerto claramente se despiden quedando otra vez solos Renata
y Jeronimo.

Jeronimo: (coloca sus manos sobre la cintura de Renata) Amor ¿que te parece si nos escapamos?

Renata: ¿Ahora?

Jeronimo: Ahora, mas tarde, mañana, pasado, cuando tu quieras.

Renata: Enserio mi amor.

Jeronimo: Bueno ahora pero juro que es solo una noche nada mas.

Renata: Ya sabes que no quiero dejar a los niños….

Jeronimo coloca un dedo sobre los labios de ella

Jeronimo: No digas mas pero compláceme ¿si? Y te prometo que a lo termine de enseñarte lo que quiero enseñarte…. Estamos de regreso en casa.

Renata: Yaaaa no me pongas esos ojos, ¿como me resisto a ti?.. ¿dime como?

Jeronimo: Eso mismo me pregunto a mi como me resisto a tanto yo…

Renata: Que vanidoso eres..

Jeronimo: ¡Es broma!… Lo único que me pregunto día y noche como puedo ser tan fuete para no comerme día y noche esas pecas y esos ojos hermosos y esa naricita…

Renata: Ay ya no digas más que me sonrojo.

Jeronimo al final logra convencer a Renata y la lleva a un lugar maravilloso de Baja California, en los cuales Montar a caballo, escalar, navegar y hasta pescar se convertían en uno de los atractivos mas emocionantes y excitantes para cualquier turista.

Luego de un paseo maravilloso lleno de nuevas aventuras, y territorios explorados Jerónimo le prepara una sorpresa más a su amada esposa, amante y confidente..

Jerónimo: ¿amor estas muy cansada?

Renata: Depende para que me quieras.

Jerónimo: No seas payasa.

Renata: ¡Payasa! Ay jerónimo obviamente que si estoy cansada pero no para hacer otras cosita (con cara de picardía).

Jerónimo: Pues si es así hoy el cielo tendrá fiesta.

Renata: Mi vida que cosas dices.

Jerónimo la dirige a un lugar especial en el que el brillo de la luna y el frio de la noche amenizaban un momento de gran pasión.

Una habitación cuya cama albergaba sabanas de sedas, velas rosas en reflejo de Amor, ternura, amistad, honor y un amor incondicional, rodeaban aquel lugar, dentro de la habitación se encontraba una pequeña alberca llena de pétalos de rosas, y velas a su alrededor.

Renata: ¡Mi amor tú nunca dejaras de sorprenderme! ¿Sabes? Me encanta que en nuestro matrimonio haya tanta pasión, tanto amor, vamos para serte franca me encanta que haya tanto placer.

Jerónimo: Es que teniendo una mujer tan cachonda, tan hermosa (la toma de la mano y le da una vuelta) y con ese cuerpazo (lo dice con una cara de deseo).

Renata: Pues claro corazón que te crees mi madre me hizo con cariño y amor. (Se ríe). Amor espérame aquí tantito ya regreso

Jerónimo: ¿A dónde vas? Renata.

Renata: Espérate allí nomas

Mientras Renata entra al baño

Luego de unos minutos

Jerónimo: Mi amor ya como que estas tardando mucho ¿no crees?

Renata: Ahí voy ahí voy (sale del baño con una actitud de seducción)

Toma una botella de vino sirve las dos copas y le da una a Jerónimo (junta su copa con la de él) lo va sentando en la cama y luego levanta una de sus piernas dejándola cae sobre las de jerónimo muy cerca de su punto débil, Jerónimo toma la pierna de Renata y la va acariciando poco a poco de forma ascendente hasta llegar a sus pompis , pero esta se aparta de él lo mira directo a los ojos tratando de intimidarlo mientras su boca reclama y pide a gritos saciar ese deseo que la consume como un fuego voraz

Renata comienza a contonease encima de Jerónimo de forma seductora y provocativa inicia con una especie de estriptis comienza a despojase de sus prendas y a bailarle mas y mas a Jerónimo mientras este refleja en su mirada de manera desbocada el deseo que lo está quemando hasta no aguantar más toma a Renata comienza a besarla por todo su cuerpo rasgando las vestiduras que aun cubrían el cuerpo de su amada por su parte Renata besa la espalda de Jerónimo haciendo pequeños mordiscos en él; Jerónimo cae sentado a la orilla de la cama con Renata sobre sus piernas, Renata en medio de la pasión rasga la camisa de Jerónimo los botones se espaciaron por la habitación, Jerónimo contempla el cuerpo de esa mujer que se posaba en sus piernas. Renata pasa sus manos por el pecho de Jerónimo hasta llegar al botón del pantalón quitando el único impedimento para consumar y saciar aquella pasión. Sin tapujos y complicaciones jerónimo y Renata se entregaban el alma en cada acto en cada movimiento Jerónimo dejaba cae el vino sobre el pecho de Renata el cual recorría su piel. Renata estando sentada encima del cuerpo de Jerónimo posaba sus manos sobre las de Jerónimo las cuales acariciaban el cuerpo de Renata. Luego de una desenfrenada pasión, agitados por tanto amor Renata poso su cabeza sobre el pecho de Jerónimo

Renata: ¿Sabes algo?

Jerónimo: ¿Qué?

Renata: Te amo

Jerónimo: Eso, ya lo sabía

Renata: Jerónimo porque eres tan odioso

Jerónimo: Se ríe no es cierto amor gracias ¡por esta acción!

Renata: Viste que bárbaro eres vale………

Al poco rato luego de platicar Renata se queda dormida Jerónimo se levanta a observar aquel bello paisaje que se veía reflejado a través del ventanal de la habitación al cabo de unos minutos Jerónimo direcciona su mirada al cuerpo de Renata el cual estaba entrelazados entre las sabanas de sedas que solo arropaban mitad de tu cuerpo. Jerónimo se acerca a ella pasando sus dedos por la espalda de Renata llegando al final de ella metiendo sus manos dentro de las sabanas en busca de más piel. Renata poco a poco abre sus ojos se voltea y jala a jerónimo hacia ella quedando cuerpo a cuerpo

Renata: Buenos días amor.

Jerónimo: Buenos días mi princesa hermosa. ¿Sabes algo?

(Renata se mueve de tal forma que ella queda encima de el)

Renata: ¿Yo?, yo se muchas cosas (se ríe)

Jerónimo se levanta la toma entre sus brazos se dirige a la pequeña alberca y poco a poco van
sumergiéndose en ésta.

Renata: Jero que fría esta el agua. ¿Qué tal si entramos en calor?

Jerónimo tiene abrazada a Renata ella con su cabeza apoyada en el pecho de su amado

Jerónimo: Mira ese hermoso amanecer que nos regala la vida.

Renata se gira con sus manos alrededor de la cintura de Jerónimo.

Renata: Para mí no hay mejor amanecer que el amanecer entre tus brazos.

Se besan de manera frenética Jerónimo alza a Renata colocándola contra el cristal del ventanal las manos de Jerónimo se encontraban a la altura de los pechos de Renata las manos de Renata estaban en los hombros de Jerónimo los labios de ambos no conciliaban separación alguna el fluido del agua pasó de ser laminar a turbulento como consecuencia de los movimientos que desenfrenaba aquella pasión. Los rallos del sol le dieron la bienvenida a un nuevo día sin embargo; para ellos el tiempo sencillamente se había detenido.. Al cabo de un tiempo Renata sale de la alberca tal cual dios la había traído a este mundo tras ella Jerónimo jalándola de un brazo y girándola hacia él.

La toma y la une a su cuerpo

Jerónimo: ¿Ya te cansaste de tanto amor?

Renata: ¡Ays! Claro que NO solo iba por una copita de vino.

Jerónimo la levanta colocándola en una mesa adyacente para continuar desbordando la pasión y el deseo de la carne.

Renata: Ven……

Jerónimo: Lo que mi peca hermosa desee

Renata de manera desenfrenada de gusta del sabor de los labios de Jerónimo, y este se deleita en el mar de pasión por el cual navega, Renata toma una fresa bañada de miel, la pasa delicadamente por los labios y el pecho de Jerónimo, este la toma en sus brazos y la dirige a la cama, se podía escuchar la risa de Renata entre tanta emoción y pasión, sus miradas eras inigualables, uno al otro se veían de manera especial contemplando aquel bello momento, el momento en que la fantasía de Renata se hacía realidad donde no existía más que un mundo, un mundo en el cual solo habitaban ellos dos inundado por un amor indestructible, un amor pasional, y sobre todo un amor incondicional, piel a piel se traspasaba el amor, piel a piel se sentía la pasión, las manos de Jerónimo recorriendo el cuerpo de Renata, disfrutando aquella Francia de felicidad que emanaban, el sol le dio paso a la lluvia trayendo consigo un agua limpia para llenar mas y mas ese nuevo mundo de mucho mas amor.

Jerónimo: Ver tu cuerpo desnudo es ver la mil maravillas juntas, es un trueno, es la calma, es la belleza que se palpa, es mi locura.

Renata: Yo quiero estar dentro de ti toda mi vida. Y si salgo sería para entrar de nuevo y no salir.

Jerónimo: Me encanta amarte, me encanta besarte, me encanta tocarte, me encanta todo lo que sea de ti.

Renata: ¡te AMO Jerónimo!

Jerónimo enmudece los labios de Renata con un beso sublime, para dar paso a las caricias y la contemplación del amor.

Pasan un par de años, los niños ya iban a la primaria, no crean que pasaron diez años solo unos cuatro años…. Eran vacaciones, y habían decidido ir de paseo a un lugar poco común para el turismo familiar aunque el paisaje podría cautivar a cualquier visitante, la noche había caído, era el momento más esperado de los eternos enamorados.

Jeronimo: Amor..

Renata: Dímelo

Jeronimo: Necesito que cierres los ojos, algunos minutos.
Renata: ¿Por qué?

Jeronimo: ¿Confías en mi?

Renata: Claro que si lo sabes.

Jerónimo: Bueno ya esta, ven aquí.

Renata: hay Jeronimo…

Jeronimo te tapa los ojos a Renata con sus manos y camina a un par de metros donde los esperaba un gran globo aerostático, nunca faltaba el toque de romanticismo pétalos de flores y por supuesto un vino para deleitar.

Renata: Jamás me dejaras de sorprender señor Linares de Monterrubio.

Jeronimo: Aunque pasen años, pasen cosas inexplicables, lo único real y verdadero es esto que siento por ti y solo por ti, así que jamás dejaras de ver estos detalles, señora de Linares.

Renata: Amo cada una de tus palabras y sobre todo cuando por un segundo dejas de escuchar al mundo y solo puedo perderme en tu mirada, una vez escuche quela felicidad no es lo que soñamos para el futuro, es lo que vemos, vivimos y sentimos ahora.

Jeronimo: Porque por amor vivimos, por amor somos quienes somos…..

Renata: Y Mientras tu corazón este aquí yo me voy al fin del mundo para vivir lo que he vivido contigo un millón de veces sin importar los obstáculos que se nos presenten, solo saber que respiro por ti y vivo en ti..

Jeronimo: Es mas allá de lo que quiero sentir porque naci en ti y muero en ti…


..................................... Fin...........................................